Reseña: Horizon Forbidden West es un mundo repleto de hermosas distracciones. No importa que el planeta ha sido destruido y Aloy es la única que puede salvarlo; ya que la cocinera del desierto de Salt Bite necesita algunos huevos, el padre de otra persona ha desaparecido y hay un agitador Thunderjaw amenazando un pequeño pueblo. Puede ser que Forbidden West haya sido prohibido sólo porque te necesita demasiado (y estoy totalmente de acuerdo con eso).
El entorno se basa en lo que ofreció Horizon Zero Dawn; un mundo abierto lleno de de misiones con el objetivo de captar tu atención, una buena narrativa de la vida postapocalíptica, dinosaurios robot y misterios tecnológicos. Hubo mucha preocupación de que esta secuela se sintiera demasiado familiar; simplemente teletransportada a un nuevo mapa. Pero desde las primeras horas de juego te das cuenta que no es así y los temores se fueron. Aunque el mismo arco narrativo está allí y las mecánicas de juego más importantes se mantienen intactas, este título es realmente una evolución; una nueva bestia adaptada sobre los huesos mecánicos de los Antiguos.
Sin importar si la siguiente misión es un pequeño encargo o parte central de la historia, hay una profundidad y amplitud en cada una de ellas con una consistencia alucinante. Lo que esperas que sea una simple misión de búsqueda es mucho más que eso y alguien que al principio piensas que es un personaje insignificante se convierte en uno de tus favoritos; incluso te desesperas por verlo de nuevo en otro lugar o escena. Esta es la clave de las experiencias en Forbidden West, ya que el cambio más notorio son las mejoras en los humanos dentro de este mundo robótico.
Aunque hay una gran cantidad de personajes memorables en el videojuego original, la desarrolladora Guerrilla ha logrado que cada persona con la que interactúas, en la secuela, sea única e interesante. Independientemente del tiempo que pases con cualquier NPC, cada uno tiene una personalidad distinta, una pequeña historia detrás y un gancho interesante. También integra una gran diversidad, incluyendo la representación de personas no binarias y personajes con discapacidades; lo que es muy importante en el mundo que vivimos actualmente.
Los pequeños detalles hacen la diferencia; por ejemplo el hecho de ver a cualquier persona, que está en una zona desértica, empapada en sudor. Mientras que la, posiblemente mejor captura facial hecha en los videojuegos, hace que cada mirada y sonrisa sean realistas. Hay mucho más humor y humanidad en este juego, y todo ello contribuye a que te sientas conectado con el mundo y su gente en Horizon Forbidden West.
Reseña: Horizon Forbidden West- Dinosaurios robóticos
Incluso los elementos del juego que están de regreso tienen más personalidad en sus articulaciones metálicas. Los Tallnecks vuelven a ser un medio para descubrir el gigantesco mapa. Hay bestias enormes parecidas a jirafas en distintas partes de Forbidden West. El truco del título original consistía en averiguar cómo llegar a sus cabezas para hackear sus conocimientos geográficos.
Sin embargo, esta vez cada una de las majestuosas criaturas tiene su propia peculiaridad narrativa. También los Cauldrons, las antiguas plantas de fabricación de robots que hay que hackear para lograr controlar a los dinosaurios, requieren un acercamiento distinto. Se pueden desbloquear tintes y pinturas faciales para personalizar aún más a Aloy. Además, se pueden anular y controlar más máquinas que nunca.
También ayuda a diversificar tu estrategia de combate. Independientemente de lo podersosa que sea Aloy (que se metió en un “problema”, entre los videojuegos, para explicar la pérdida de todo su armamento avanzado y su armadura de poder) los dinosaurios robot siempre serán los reyes. Un movimiento en falso puede costarte la vida contra los rivales más fuertes, como los gigantescos Tremortusks; inspirados en los mamuts que han protagonizado los tráilers del juego.
La única manera de acabar con ellos es planificar, elaborar estrategias y estar seguro de que te has preparado. Además de moverte y atacar con la mayor precaución posible antes de que el caos se apodere de ti. Me encanta el hecho de que siempre sea un reto derrotar a las máquinas más grandes; Horizon Forbidden West tiene un aumento de dificultad que nunca llegas a superar. Sin embargo, se asegura de que la derrota no sea más que una recompensa.
Aunque el juego no explica bien algunos de los aspectos más complicados de sus sistemas. Sobre todo en lo que respecta a los diferentes tipos de munición, las opciones de disparo y la forma de sacar el máximo provecho de su complejo árbol de habilidades. El nuevo sistema de Valor (que otorga a Aloy grandes mejoras y potenciadores para usar en el combate que se pueden cambiar a placer) es una incorporación bienvenida que siempre deleita con sus pequeños disparos en las escenas de corte y el uso ilimitado de la pintura de guerra. Sin embargo, cualquiera que no haya jugado el título original podría confundirse con los subsistemas de armamento.
Otro de los aspectos más frustrantes es la escalada. Han dicho que Horizon Forbidden West ofrece “escalada libre” sin restricciones de zonas en las que no se pueda subir. Pero, en realidad, la escalada se limita a asas secretas que aparecen con un pulso de tu enfoque. No hay consistencia entre dónde y cuándo puedes escalar y las indicaciones de los botones para saltar entre los agarres son torpes e incómodas.
El caerme sin querer desde la pared de un rascacielos fue algo que me pasó muchísimas veces y el movimiento se volvió frustrante; hasta el punto de hacerme enojar de verdad. Desde luego, no es un ejemplo de la fluidez a la hora de escalar en el mapa; algo que sí encuentras en títulos como Assassin’s Creed: Valhalla y eso es una pena cuando te dan tantas ganas de explorar el mundo.
Sin embargo, lo que siempre funciona es que decidir ir a explorar siempre es un placer. Como en todos los mejores videojuegos de mundo abierto, siempre hay algo que descubrir sobre el horizonte. Horizon Forbidden West tiene algunas zonas bloqueadas que podrás descubrir cuando tengas el nivel de habilidad adecuado.
En todo momento existe el sutil estímulo de volver a visitar las zonas que ya conoces para descubrir detalles que te hayas perdido. Y debido a la calidad de las misiones secundarias de Forbidden West (o de otros momentos narrativos), no querrás perderte de nada. La introducción de la natación añade una mayor profundidad al mundo, aunque viene acompañada de sus propios peligros y, cuando la escalada funciona correctamente, todo se fusiona para que tengas la sensación de libertad de ir a donde quieras.
Reseña: Horizon Forbidden West- Solamente es Aloy
En el centro de todo Horizon Forbidden West está Aloy. Nuestra heroína que regresa es tan cautivadora, en esta secuela, como en el título original; sino es que más. Todo esto porque algunos de los obstáculos que tiene que superar se sienten mucho más relacionados en esta entrega.
En el primer juego la vimos como una marginada que creció y tratamos de saber de dónde provenía. Los descubrimientos que hace, Aloy, de Elisabeth Sobeck y las actividades de los antiguos se convierten en su motivación. Pero en esta ocasión, ya tiene tantos conocimientos que es el arco más humano el que realmente hace avanzar la historia.
Por supuesto, hay un mundo que hay que solucionar y grandes enemigos que hay que derrotar. Pero se trata de arreglar el mundo, al mismo nivel de importancia que ver cómo Aloy aprende a saber porqué vale la pena salvar a la gente de la Tierra, tanto como al propio planeta. El camino que recorre desde su independencia incondicional (bastante molesta), hasta encariñarse con los amigos (viejos y nuevos) que se abren paso en su vida es inolvidable. Más de una vez me reí a carcajadas o lloré.
El resultado es un reparto por el que, tanto yo como Aloy, moriríamos. Los personajes se complementan con las aventuras experimentadas con el objetivo de salvar al mundo. Se sienten tan reales que puede que prefieras retrasar las misiones de la historia principal para prologar tus partidas. En verdad yo no quise que se acabara tan rápido.
También me enamoré de los detalles más sutiles, como escuchar la forma en que los habitantes de Forbidden West reaccionan a los cambios de identidad de Aloy. Conocida inicialmente por muchos nombres en la tierra, como “Red”, “Savior of Meridian” y “Cabello de fuego”; con el tiempo te darás cuenta de que ella quiere ser llamada “sólo Aloy”. Es un mundo en el que querrás pasar tiempo y, como Aloy, querrás proteger a toda costa.
¿Y he mencionado que también es completamente impresionante? Este es el primer mundo abierto inmenso de PS5 y la variedad de cosas que encontrarás en Horizon Forbidden West hará que siempre busques el botón de captura de pantalla. Las luces de neón de Las Vegas, los restos antiguos de San Francisco y el brillo que te advierte que un robot te está buscando, se ve y se siente magnífico al jugar.
Lo que Guerrilla Games ha logrado con Forbidden West es simplemente fenomenal. La historia, la jugabilidad, las mecánicas y el propio mundo han mejorado mucho respecto al juego original, lo cual ya es una hazaña. La escalada, irónicamente, es lo único que le impide alcanzar la perfección absoluta. Pero no es suficiente para que la última travesía de Aloy se quede sin nada más que una calificación alta. Sabes que un juego es bueno cuando los dinosaurios robot no son lo primero de lo que quieres hablar con tus amigos.