En el mundo de los automóviles de lujo, pocos nombres están tan asociados a la tradición como Rolls-Royce. Sin embargo, la transición hacia la electrificación de sus modelos ha sido un paso natural para la marca, especialmente si se tiene en cuenta su enfoque en la suavidad, el silencio y la grandeza. Es por eso que hemos recopilado para ti toda esta información. A continuación te dejamos todos los detalles
Rolls-Royce
Rolls-Royce ha logrado realizar la transición a vehículos eléctricos con mayor facilidad que otros competidores, al lanzar su primer modelo totalmente eléctrico sin perder su esencia. La marca ha impulsado su evolución al atraer a un público más joven, especialmente en mercados como China, donde las ventas han experimentado un notable crecimiento. Con este objetivo en mente, la firma ha adoptado una imagen más audaz y moderna, visible en sus modelos Black Badge, que combinan el lujo clásico con una propuesta más urbana y arriesgada. Este enfoque da la impresión de que Rolls-Royce se ha adentrado en un mundo paralelo, donde se mezclan elementos de la cultura de club con un aire más contemporáneo.
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El Spectre Black Badge, el primer coche eléctrico de Rolls-Royce, ejemplifica perfectamente esta visión renovada. Este modelo ha alcanzado un gran éxito y se ha convertido en uno de los más solicitados de la marca en Europa, según un informe de Inside EVs. Entre las principales novedades, destaca su parrilla Pantheon iluminada y el exclusivo color violeta vapor, inspirado en la estética de los clubes nocturnos de los años 1980 y 1990. Además, el vehículo presenta una serie de detalles que lo hacen aún más único, como las placas de estribo con la insignia Black Badge y una pintura en negro hielo para quienes desean un estilo más audaz. Las llantas de 23 pulgadas en acabado negro y el interior con detalles en tejido de carbono completan su diseño impresionante.
Rendimiento
Pero no solo es el diseño lo que sorprende. En cuanto a rendimiento, el Spectre Black Badge ha elevado su potencia a 485 kW al activar un nuevo botón con el símbolo del infinito en el volante, brindando al conductor una experiencia de conducción excepcional. Además, se han realizado ajustes significativos en el chasis, la dirección y la suspensión, con el fin de mejorar el control y la estabilidad del vehículo. Gracias a estas modificaciones, se reduce el “agachamiento” durante las aceleraciones y desaceleraciones, proporcionando una conducción más precisa y suave. Rolls-Royce ha logrado fusionar la tradición con la innovación, creando un coche eléctrico que no solo mantiene su reputación de lujo, sino que también se adapta a las expectativas de un público más joven y moderno.
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