Plantas vs Zombies fue/es un videojuego que se publicó por allá de un lejano 2009, de gráficos sencillos pero reconocibles en cualquier parte, que la verdad no sé si necesita una introducción, quizá para quienes nacieron luego del 2005 sea necesaria. El juego consiste en defender tu casa del ataque de hordas de zombies ¿con qué? ¡Usando plantas! Vaya, el título lo dice…
El juego se lanzó originalmente en 2009 para PC, a los meses en Mac OS y para 2010 ya estaba disponible en dispositivos móviles y en consolas de aquella época. Ahora, el remastered llegó en su fecha de lanzamiento a PC, PlayStation, Xbox y Nintendo.

No sé ustedes, pero al menos yo recuerdo que en la secundaria —entre 2013 y 2015 — cuando una mayoría general empezó a tener acceso a celulares “inteligentes” (iPhone 4S por ejemplo), yo llegué a ignorar mi clase de química por estar jugando. Se convirtió en un clásico y referente de mi adolescencia, al que le dediqué bastante de mi tiempo. Ahora, 16 años después, regresó a asaltar mi consola.
Plantas vs Zombies Replanted trae de vuelta esos buenos recuerdos pero en alta calidad, con colores brillantes, niveles nuevos y mejorando lo que ya conocíamos, abriendo la puerta a la re jugabilidad con mecánicas para acelerar las hordas, en caso de quieras pasar rápido un nivel o un modo de permamuerte, para probar tus habilidades en el Apocalipsis.
Mis niveles favoritos son los de la noche, porque puedo usar la seta que convierte a uno de los zombies en aliado y por alguna razón me encanta ver a la planta que devora tumbas hacer su trabajo. Creo que por otra parte, el nivel que más se me complicó fue el de la piscina, porque como necesitas pasos extra para poner tus plantas puede demorar y los zombies que bucean son un dolor de cabeza.

De todo este remastered, mi parte favorita fue el modo cooperativo/multijugador ya que es una adición nueva a la esencia que ya conocíamos. Fue divertido tener que ponerme de acuerdo en la estrategia con mi pareja, para que los zombies no cenaran nuestros cerebros.

Fue una experiencia agradable revisitar un juego que me acompañó en parte de mi adolescencia, y que a la fórmula original le agregasen detalles para refrescarlo fue un acierto.
Desde la redacción le damos un 8/10, así que corre a probarlo, estimado cabezallena.


