Tabla de contenidos
Escuchar música es un verdadero placer. La música nos transporta y nos eleva, puede hacernos cambiar de un humor a otro, nos permite seguir los ritmos con el cuerpo y hasta nos hace cantar. Nada más lindo que escuchar nuestra música favorita en cualquier momento y en cualquier lugar, sin interferencia ni ruidos molestos.
A todos nos gusta escuchar nuestras canciones preferidas con la mejor fidelidad de sonido posible. La calidad del sonido, siempre, juega un papel importante, y escuchar música de alta definición nos otorga un verdadero plus que desencadena nuestras emociones y hace que nuestro cerebro genere dopamina, la hormona que influye en nuestro bienestar.
¿Qué significa alta fidelidad?
Conocida como HIFI, debido a que hace alusión a la expresión inglesa, podemos asegurar que la alta fidelidad es lo que da la pauta de la calidad de la reproducción del sonido. Lo ideal es que este sea lo más similar la sonido original, minimizando los ruidos para lograr que la distorsión sea mínima. Su objetivo es reproducir lo más fielmente posible el sonido con todos sus matices.
Distorsión
La distorsión es una alteración que se produce en la reproducción del audio. Una de sus alteraciones más conocidas es el clipping; que ocurre cuando un amplificador está sobrecargado, es decir, cuando pasó la señal máxima que un sistema puede manejar.
Medidas de fidelidad
Para conocer con exactitud la precisión de lo que estamos escuchando, es importante que realicemos una evaluación de la pista digital. Las medidas de fidelidad de audio se expresan en Bits (profundidad de Bits) y frecuencia de muestreo expresada en KH2.
Bits
Hay sonidos extremadamente suaves como la caída de una pluma, y sonidos estruendosamente fuertes, como el rugido del motor de un auto de carrera. Entre estos extremos, se encuentran los sonidos que el oído humano puede captar. La profundidad de Bits, es, precisamente, la que determina qué sonidos podemos escuchar; qué susurros, qué golpes; qué acordes.
Es elemental saber que en la música hay dos profundidades de Bits: una es la profundidad de lo que fue grabado en un estudio y la otra es la profundidad de Bits del archivo de la canción que estaríamos escuchando, por ejemplo, por Streaming.
Los Bits se presentan en dos tipos de profundidades: 24 y 16.
· 24 Bits: es la profundidad a la que se graba la música digital en un estudio; es también la profundidad de Bits a la cual se considera como un archivo de música de alta resolución.
· 16 Bits: se conoce como calidad CD. A este nivel de profundidad se escuchan los sonidos más suaves y más fuertes en una melodía.
Nuestros oídos están preparados para escuchar un determinado rango de frecuencias. Hay una franja limitada que va desde los 20H2 hasta los 20000H2 (o 20KH2), en una persona sin problemas auditivos. De lo original a lo que se escucha, hay un trecho largo; nunca escuchamos las canciones tal como fueron grabadas, a 24 Bits, porque esos archivos son muy grandes.
Versiones originales y versiones nuevas
La música de CD está asociada a la calidad más alta. En los años 80, cuando aparecieron los primeros compacts, no era posible almacenar un álbum completo de canciones en formato de 24 Bits. Por ese motivo, las versiones originales tuvieron que reducirse a 16 Bits; tamaño que se eligió porque posibilitaba escuchar el rango completo de sonidos; desde los más suaves hasta los más fuertes.
Con la llegada de Internet, todo cambió y la música no fue la excepción. Las melodías no podían trasladarse ni a 16 ni a 24 Bits. Se necesitaban archivos muchísimo más pequeños y se crearon dos nuevas maneras de transferir la música: con pérdidas y sin pérdidas.
· Música con pérdidas
En este caso, se optó por eliminar algunas partes de las canciones originales teniendo en cuenta la probabilidad de que no se notara (fue un trabajo minucioso que tuvo en cuenta los acordes que se repetían para efectuar las modificaciones).
· Música sin pérdidas
Es la capacidad de escuchar de acuerdo con lo que ofrecen los servicios de Streaming y se evalúa en dos medidas: profundidad de Bits y frecuencia de muestras.
Los celulares, tampoco se han quedado atrás en el tema, y, aunque parecía increíble, se convirtieron en los difusores más populares de música. Aunque la calidad del audio no es la misma que en los otros equipos de reproducción, se escucha música mientras se hacen caminatas, en los transportes públicos y mientras se trabaja.
¿Qué se necesita, entonces, para montar un buen equipo de sonido en nuestra casa?
Para disfrutar del mejor de los sonidos en nuestro hogar, es preciso contar con algunos dispositivos esenciales como un amplificador, una caja acústica, un altavoz, una fuente y algunos metros de cable. No es necesario disponer de un gran presupuesto; hay marcas como Opera, NAD o Rotel que nos proporcionan sonidos envolventes y nítidos y, además, son asequibles y verdaderamente eficaces.
· Audífonos de alta fidelidad
Sin ninguna duda, son un magnífico accesorio para escuchar música ya sea desde nuestro sillón preferido o desde el teléfono celular. Estos auriculares reproducen de manera exacta y fiel la grabación que se hizo dentro de un estudio y son, en cierta medida, bastante asequibles si los relacionamos con la calidad que nos ofrecen. Entre la amplia variedad de marcas que presenta el mercado, los audífonos inalámbricos Bose, se destacan por su sonido envolvente y por las distintas opciones de conectividad que ofrecen.
Debido a su excelente calidad, los audífonos Bose, son especiales para escuchar música de alta fidelidad y relajarnos durante un buen tiempo. Su carga inalámbrica proporciona hasta 20 horas de uso ininterrumpido y tienen una vida útil de hasta 5 años, lo que habla muy bien de su rendimiento, convirtiéndolos en una excelente opción.
· Hardware y Software
La combinación de Hardware es un factor decisivo al armar nuestro equipo. Hay que elegir las fuentes correctas, fijarse bien el lugar disponible y encontrar la electrónica adaptable a nuestros nuevos dispositivos. Software, es también muy importante. Tenemos que tener especial cuidado en elegir el adecuado teniendo presente que Internet pone a disposición nuestra un abanico muy amplio de aplicaciones, tanto para Windows como para MacOs. El principal objetivo es que el DAC de nuestro equipo, o sea el conversor, reciba a través de una entrada USB los datos que confirman nuestro contenido musical, sin alteración alguna.
· Fuente de sonido
Es el primer eslabón de la cadena, el aparato que proporciona la señal de audio con la que se accede. Puede ser un reproductor de CD, un tocadiscos, o un reproductor de música digital. Lo importante es que sea de buena calidad. Pioneer, Yamaha, Samsung, son algunos ejemplos de fuentes prestigiosas y recomendables.
· Amplificador
Este es el dispositivo que se encarga de ampliar la señal de audio y lo envía a los altavoces. Podemos elegir entre un amplificador integrado y un conjunto llamado preamplificador. El amplificador integrado es el encargado de recibir la señal y ampliarla tanto como sea necesario para excitar los altavoces de las cajas acústicas. El preamplificador, en cambio, por lo general, está restringido solamente a dos canales.
· Caja acústica
Según los fabricantes, las cajas acústicas tienen diferente estética y formato, pero se componen de tres elementos fundamentales: recinto, filtro divisor de frecuencia y altavoces, que son los encargados de reproducir el sonido.
· Cables
Son los elementos que conectan los dispositivos; y, aunque aparezcan como algo de menor importancia, es vital que sean de buena calidad para evitar inconvenientes como puede ser la pérdida de señal. Cuidarlos, es un detalle importante.
Buena música en casa
Los equipos actuales de alta fidelidad están fabricados con materiales de muy buena calidad; son potentes y sumamente eficientes tanto para el entretenimiento doméstico como para el uso profesional. Poseen precisión sonora, pureza de estilo y otorgan la posibilidad de escuchar de manera increíble. Para asegurarnos el mejor de los sonidos en nuestra casa, es necesario colocar los parlantes a una buena distancia entre uno y otro, asegurarnos que haya concordancia entre ellos y el amplificador; y tratar de integrar los equipos al ambiente de manera tal, que el ambiente se vea de manera agradable.
Ayer y hoy
El mercado de la alta fidelidad, durante las décadas del 50 y del 60, fue dominado por empresas japonesas, norteamericanas y europeas. A China no le fue fácil abrirse al mercado, debido al preconcepto de que sus fabricaciones son de baja calidad, pero con el correr del tiempo logró posicionar sus productos con marcas como Cayin, Xindak y FiiO entre otras, que actualmente se destacan por su buena por su buena calidad y por el excelente sonido que ofrecen sus dispositivos. Siempre en constante evolución, se produjo un pico importante de consumo durante los años 70 y desde ese momento no se ha dejado de avanzar. Hoy podemos disfrutar de nuestras melodías predilectas desde nuestra casa y desde nuestro teléfono inteligente, sabiendo que, día a día, los expertos están trabajando para ofrecernos,
